En paralelo a la caracterización global de las masas de pino marítimo en Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi que nos ha permitido diferenciar y caracterizar tipologías de masa, los diferentes socios del proyecto han llevado a cabo un intenso trabajo de búsqueda de zonas donde había programada una corta para los meses inmediatos, a través de contacto con maderistas, propietarios y administraciones. El cruce de los datos de análisis y de zonas de corta donde se han obtenido acuerdos para llevar a cabo las operaciones, ha sido la base para la localización del 36 parcelas, una tarea más difícil de lo previsto inicialmente, que ha exigido una coordinación intensa y permanente entre todos los socios y red de actores implicados.
 
Una vez localizadas las parcelas, los diferentes socios del proyecto han llevado a cabo todas las tareas de medición y caracterización sobre el terreno. Se han replanteado parcelas de 14,1 m de radio y se han señalado todos los árboles, poniendo especial atención en los 10 árboles elegidos para ser cortados y trasladados hasta Exfopino para su aserrado. Se han medido todos los diámetros de la parcela y las alturas de los 10 árboles seleccionados, además de otra serie de datos selvícolas. Se ha evaluado su resistencia y calidad con tecnologías sónicas que permiten estimar estos valores con el árbol en pie. Se ha llevado a cabo una caracterización visual de la calidad tecnológica a partir de unas tablas elaboradas basadas en la norma UNE EN 1927-2:2008 (Clasificación de calidad de la madera en rollo de coníferas. Parte 2: Pinos) pero utilizando sólo los parámetros o singularidades que son observables o medibles en el árbol en pie; y se ha ampliado con los parámetros mínimos requeridos por la industria de la madera a la hora de generar un producto o darle un destino.
 
Estos trabajos son la base para poder avanzar en las próximas tareas que permitirán establecer las bases de gestión para la obtención de madera de calidad de Pino Marítimo.